47. En consecuencia, el rey absolvió a Menelao, causante de tanta crueldad, y condenó a muerte a aquellos infelices, que hubieran sido absueltos aun en el caso de que su causa se hubiera presentado ante un tribunal cruel.





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina