6. y germinó y se hizo una vid desbordante, de poca altura; sus sarmientos tiraban hacia el águila y sus raíces estaban bajo ella. Se hizo una vid, echó ramas, multiplicó los sarmientos.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina