9. De este sacrificio de reconciliación ofrecerá al Señor, como ofrenda quemada, las grasas: la cola entera cortada desde la rabadilla, la grasa que recubre las entrañas y la que hay sobre ellas;





“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina