Isaías, 50
4. El Señor Dios me ha dado una lengua de experto para que yo sepa responder al cansado. Cada mañana me despierta el oído para escuchar como un discípulo.
4. El Señor Dios me ha dado una lengua de experto para que yo sepa responder al cansado. Cada mañana me despierta el oído para escuchar como un discípulo.
“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraco com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina