7. Mándame también madera de cedro, ciprés y sándalo del Líbano, pues conozco bien la habilidad de tus súbditos en derribar los árboles del Líbano. Mis súbditos trabajarán con los tuyos.





“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina