Fondare 210 Risultati per: nuestra

  • Han nacido las flores en la tierra, ha llegado el tiempo de la poda; ya la voz de la tórtola se siente en nuestra tierra. (Cantar 2, 12)

  • Las mandrágoras exhalan su perfume. A nuestra puerta están todos los frutos exquisitos; los nuevos igual que los añejos, oh amor mío, los he guardado para ti. (Cantar 7, 14)

  • Tenemos una hermana pequeñita, no tiene pechos todavía. ¿Qué hemos de hacer con nuestra hermana el día en que se trate de su boda? (Cantar 8, 8)

  • Dicen entre sí, calculando falsamente: "Corta y triste es nuestra vida; para el fin del hombre no hay remedio, y no se conoce persona que se salve del abismo. (Sabiduría 2, 1)

  • Nuestro nombre con el tiempo caerá en el olvido; nadie se acordará de nuestras obras. Como huella de nube pasará nuestra vida; se disipará como niebla perseguida por los rayos del sol, y por su calor abatida. (Sabiduría 2, 4)

  • Pues nuestra vida es el paso de una sombra, nuestro fin es sin retorno; porque se pone el sello y nadie vuelve. (Sabiduría 2, 5)

  • Que no faltemos ninguno a nuestra orgía; por todas partes dejemos señales de nuestro regocijo, pues ésta es nuestra herencia y nuestra suerte. (Sabiduría 2, 9)

  • Sea nuestra fuerza la norma de la justicia, porque lo débil está visto que es inútil. (Sabiduría 2, 11)

  • Acechemos al justo, pues nos fastidia; se opone a nuestras obras, nos echa en cara las infracciones de la ley y nos acusa de traicionar nuestra educación. (Sabiduría 2, 12)

  • Piensa, más bien, que nuestra vida es un pasatiempo y la existencia una feria lucrativa; porque conviene, dice, sacar partido de todo, aun de lo malo. (Sabiduría 15, 12)

  • Aquel día siete mujeres se disputarán a un hombre y le dirán: Nosotras comeremos nuestro pan y nuestro vestido vestiremos; deja sólo que llevemos tu nombre, quítanos nuestra infamia. (Isaías 4, 1)

  • apartaos del camino, desviaos del sendero; quitad de nuestra presencia al Santo de Israel. (Isaías 30, 11)


A humildade e a caridade são as “cordas mestras”. Todas as outras virtudes dependem delas. Uma é a mais baixa; a outra é a mais alta. ( P.e Pio ) São Padre Pio de Pietrelcina