Fondare 94 Risultati per: siquiera

  • Pero ¿quién será capaz de construirle una Casa, si ni siquiera el cielo y lo más alto del cielo pueden contenerlo? ¿Y quién soy yo para construirle una Casa, aunque sólo sea para quemar incienso en su presencia? (II Crónicas 2, 5)

  • Yo no lo quería creer, sin venir antes a verlo con mis propios ojos. Pero ahora compruebo que no me habían contado ni siquiera la mitad: el cúmulo de tu sabiduría supera la fama que llegó a mis oídos. (II Crónicas 9, 6)

  • En el trigésimo noveno año de su reinado, Asá se enfermó gravemente de los pies. Pero ni siquiera en su enfermedad recurrió al Señor, sino a los médicos. (II Crónicas 16, 12)

  • Ragüel lo oyó y dijo al joven: "Come y bebe, y disfruta de esta noche, porque nadie tiene más derecho que tú, hermano, a casarse con mi hija Sara. Ni siquiera yo puedo dársela a otro, ya que tú eres mi pariente más cercano. Pero ahora, hijo mío, te voy a hablar con toda franqueza. (Tobías 7, 10)

  • Incluso, están resueltos a consumir las primicias del trigo y los diezmos del vino y del aceite, que ya han sido consagrados y reservados para los sacerdotes que ejercen sus funciones delante de nuestro Dios en Jerusalén: esas cosas que a ninguno del pueblo le es lícito ni siquiera tocar con sus manos. (Judit 11, 13)

  • Luego te conduciré a través de la Judea hasta las puertas de Jerusalén, y pondré tu sitial en medio de ella. Tú los conducirás como a ovejas que no tienen pastor, y ni siquiera un perro se atreverá a ladrar ante ti. Todas estas cosas me fueron comunicadas anticipadamente, y yo he sido enviada a anunciártelas". (Judit 11, 19)

  • Si Dios no se fía ni siquiera de sus santos y el cielo no es puro a sus ojos, (Job 15, 15)

  • Por eso lo temen los hombres, y él no tiene en cuenta ni siquiera a los sabios. (Job 37, 24)

  • Todos están extraviados, igualmente corrompidos; nadie practica el bien, ni siquiera uno solo. (Salmos 14, 3)

  • Todos están extraviados, igualmente corrompidos; nadie practica el bien, ni siquiera uno solo. (Salmos 53, 4)

  • Mi boca anunciará incesantemente tus actos de justicia y salvación, aunque ni siquiera soy capaz de enumerarlos. (Salmos 71, 15)

  • pero ellos no se defendieron, ni siquiera arrojándoles piedras o cerrando la entrada de sus refugios. (I Macabeos 2, 36)


“Aquele que procura a vaidade das roupas não conseguirá jamais se revestir com a vida de Jesus Cristo.” São Padre Pio de Pietrelcina