Cantar, 3
9. Ha puesto de plata sus columnas, de oro su dosel, de púrpura el asiento, todo por dentro recamado con amor por las hijas de Jerusalén.
9. Ha puesto de plata sus columnas, de oro su dosel, de púrpura el asiento, todo por dentro recamado con amor por las hijas de Jerusalén.
“O grau sublime da humildade é não só reconhecer a abnegação, mas amá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina