Talált 271 Eredmények: vuestras

  • Pr eso profetiza y diles: Esto dice el Señor Dios: Mirad, yo abriré vuestras tumbas, os haré salir de vuestros sepulcros, pueblo mío, y os llevaré a la tierra de Israel. (Ezequiel 37, 12)

  • Y sabréis que yo soy el Señor, cuando abra vuestras tumbas y os haga salir de vuestros sepulcros, pueblo mío. (Ezequiel 37, 13)

  • habéis introducido extranjeros, incircuncisos de corazón e incircuncisos de cuerpo en mi santuario para que profanen mi templo, mientras vosotros me ofrecíais mi pan, grasa y sangre, quebrantando así mi alianza con todas vuestras monstruosidades. (Ezequiel 44, 7)

  • Lo mejor de todas vuestras primicias y de toda clase de productos vuestros, todas las ofrendas que hagáis, pertenecerán a los sacerdotes. Así daréis a los sacerdotes lo mejor de vuestra parte, a fin de que la bendición repose sobre vuestras casas. (Ezequiel 44, 30)

  • El rey les respondió: "Tened bien presente mi decisión: Si no me decís el sueño y no me dais su interpretación, seréis cortados en pedazos y vuestras casas serán reducidas a un montón de ruinas. (Daniel 2, 5)

  • Entonces Susana gimiendo exclamó: "¡Ay, estoy en un gran aprieto! Si consiento, me espera la muerte; si no consiento, no escaparé de vuestras manos. (Daniel 13, 22)

  • Pero prefiero caer en vuestras manos que consentir en aquello que es pecado ante el Señor". (Daniel 13, 23)

  • Diréis a vuestros hermanos: "Mi-pueblo", y a vuestras hermanas: "Compadecida". (Oseas 2, 3)

  • Sobre las cimas de los montes ofrecen sacrificios; en las colinas queman incienso bajo la encina, el chopo o el terebinto: ¡tan agradable es su sombra! Así se prostituyen vuestras hijas, y vuestras nueras cometen adulterio. (Oseas 4, 13)

  • No castigaré a vuestras hijas porque se prostituyan, ni a vuestras nueras porque cometan adulterio, puesto que ellos también se van con prostitutas y con las prostitutas sagradas ofrecen sacrificios. Así el pueblo ignorante se prepara a la ruina. (Oseas 4, 14)

  • Después de esto yo derramaré mi espíritu sobre todos los hombres. Vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán, vuestros ancianos tendrán sueños, y vuestros jóvenes, visiones. (Joel 3, 1)

  • Daré vuestros hijos y vuestras hijas a los habitantes de Judá, y ellos los venderán al lejano pueblo de los sabeos. Lo ha dicho el Señor. (Joel 4, 8)


“O grau sublime da humildade é não só reconhecer a abnegação, mas amá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina