Talált 206 Eredmények: obra

  • a condición, desde luego, que guardes y pongas por obra todos estos mandamientos que yo te doy hoy, amando a tu Dios y siguiendo sus caminos-, entonces, a aquellas tres ciudades añadirás otras tres más. (Deuteronomio 19, 9)

  • Hoy te manda el Señor, tu Dios, poner por obra estos preceptos y mandatos. Guárdalos y ponlos en práctica con todo tu corazón y toda tu alma. (Deuteronomio 26, 16)

  • ¡Maldito el hombre que haga un ídolo tallado o fundido, cosa horrible para el Señor, obra de artífice, y lo ponga en lugar oculto! Y todo el pueblo responderá: ¡Amén! (Deuteronomio 27, 15)

  • Pero si obedeces al Señor, tu Dios, guardando y poniendo por obra todos estos mandamientos que hoy te prescribo, el Señor, tu Dios, te elevará sobre todas las naciones de la tierra. (Deuteronomio 28, 1)

  • Bendice sus esfuerzos, Señor, y acepta la obra de sus manos. Parte los lomos de sus adversarios, y los que le odian que no se levanten. (Deuteronomio 33, 11)

  • Entonces él envió mensajeros a los de Yabés Galaad para decirles: "Que el Señor os bendiga por haber cumplido esta obra de misericordia con Saúl, vuestro señor, y por haberle dado sepultura. (II Samuel 2, 5)

  • Que el Señor os trate con misericordia y fidelidad. También yo os pagaré esta buena obra por haberos portado así. (II Samuel 2, 6)

  • Así quedó ultimada la obra de las columnas. (I Reyes 7, 22)

  • Jirán hizo también los calderos, palas y aspersorios. Así terminó Jirán de hacer toda la obra que llevó a cabo para el rey Salomón en el templo del Señor: (I Reyes 7, 40)

  • Oro, plata, bronce y hierro hay en abundancia. ¡Adelante, manos a la obra y que el Señor te ayude!". (I Crónicas 22, 16)

  • Piensa ahora que el Señor te ha elegido para que le construyas una casa como santuario. ¡Animo y manos a la obra!". (I Crónicas 28, 10)

  • David dijo a su hijo Salomón: "Sé fuerte, ten ánimo y pon manos a la obra. No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor, mi Dios, está contigo y no te dejará ni abandonará hasta que hayas concluido toda la obra para servicio del templo del Señor. (I Crónicas 28, 20)


“Como Jesus, preparemo-nos a duas ascensões: uma ao Calvário e outra ao Céu. A ascensão ao Calvário, se não for alegre, deve ao menos ser resignada!” São Padre Pio de Pietrelcina