Talált 960 Eredmények: ciudad de refugio
Yo y todo el pueblo que me acompaña nos acercaremos a la ciudad y, cuando ellos salgan a nuestro encuentro como la primera vez, huiremos ante ellos. (Josué 8, 5)
Ellos saldrán en nuestra persecución, y así los alejaremos de la ciudad, porque se dirán: Huyen delante de nosotros como la primera vez. (Josué 8, 6)
Entonces vosotros saldréis de la emboscada para tomar la ciudad. El Señor, vuestro Dios, la pondrá en vuestras manos. (Josué 8, 7)
Una vez que hayáis tomado la ciudad, le prenderéis fuego. Éstas son las órdenes que debéis cumplir. ¡Atención! Soy yo el que os lo mando". (Josué 8, 8)
Todos los hombres de guerra que estaban con él subieron, se acercaron, llegaron frente a la ciudad y acamparon al norte de Ay. Entre él y Ay había un valle. (Josué 8, 11)
Josué tomó unos cinco mil hombres y los colocó en emboscada entre Betel y Ay, al poniente de la ciudad. (Josué 8, 12)
El pueblo estaba acampado al norte de la ciudad, y la emboscada al poniente. Josué pasó aquella noche en el campamento. (Josué 8, 13)
Cuando el rey de Ay vio la situación, salió a toda prisa a presentar batalla contra Israel, él y todo su pueblo, en la pendiente de frente a la Arabá; pero sin saber que le habían tendido una emboscada por detrás de la ciudad. (Josué 8, 14)
Entonces todo el pueblo que estaba en la ciudad se congregó para perseguirlos, y en la persecución se alejaron de la ciudad. (Josué 8, 16)
No quedó nadie en Ay que no saliese a perseguir a Israel. Por perseguirlos dejaron indefensa la ciudad. (Josué 8, 17)
El Señor dijo a Josué: "Extiende hacia Ay la jabalina que tienes en la mano, porque te la voy a entregar". Y Josué extendió hacia la ciudad la jabalina que tenía en la mano. (Josué 8, 18)
Cuando extendió el brazo, los hombres de la emboscada salieron rápidamente de su escondite, tomaron carrera y, entrando en la ciudad, se apoderaron de ella y se dieron prisa a prenderle fuego. (Josué 8, 19)