Talált 198 Eredmények: Mandamientos

  • Pero el pueblo de Israel se rebeló contra mí en el desierto. No siguieron mis mandamientos, menospreciaron mis leyes, las que debe el hombre practicar para vivir, no tuvieron respeto alguno por mis sábados. Entonces pensé descargar mi cólera contra ellos y hacerlos desaparecer en el desierto. (Ezequiel 20, 13)

  • porque habían rechazado mis mandamientos, no habían seguido mis leyes, habían profanado mis sábados y habían vuelto a sus ídolos. (Ezequiel 20, 16)

  • Yo soy Yavé, su Dios, sigan mis mandamientos, observen mis leyes y pónganlas en práctica. (Ezequiel 20, 19)

  • Pero los hijos se rebelaron contra mí, no siguieron mis mandamientos, no observaron mis leyes (esas leyes que el hombre debe poner en práctica para vivir) y no tuvieron respeto alguno por mis sábados. Pensé desencadenar mi cólera contra ellos, derramar mi furor sobre ellos en el desierto, (Ezequiel 20, 21)

  • Porque no habían puesto en práctica mis leyes, habían despreciado mis mandamientos, no habían respetado mis sábados sino que sus ojos se habían vuelto hacia los sucios ídolos de sus padres. (Ezequiel 20, 24)

  • Llegué hasta darles mandamientos malos y leyes incapaces de hacerlos vivir: (Ezequiel 20, 25)

  • si devuelve lo que se le ha prestado o que haya robado, si camina según mis mandamientos y no comete más injusticias, en verdad vivirá y no morirá. (Ezequiel 33, 15)

  • Pondré dentro de ustedes mi Espíritu y haré que caminen según mis mandamientos, que observen mis leyes y que las pongan en práctica. (Ezequiel 36, 27)

  • Sobre ellos reinará mi servidor David, y tendrán todos un solo pastor. Entonces caminarán según mis mandamientos, observarán mis leyes y las pondrán en práctica. (Ezequiel 37, 24)

  • Tendrán autoridad para juzgar en los procesos, juzgarán según mis reglas, observarán mis leyes y mis mandamientos en todo lo concerniente a las fiestas, y santificarán mis sábados. (Ezequiel 44, 24)

  • Porque hemos pecado y obrado perversamente alejándonos de ti. Pecamos mucho en todo y no dimos oído a tus mandamientos. (Daniel 3, 29)

  • Rogué a Yavé, mi Dios, y le hice esta confesión SSeñor, Dios grande y temible, que guardas la alianza y el amor a los que te aman y observan tus mandamientos. (Daniel 9, 4)


“O Senhor nos dá tantas graças e nós pensamos que tocamos o céu com um dedo. Não sabemos, no entanto, que para crescer precisamos de pão duro, das cruzes, das humilhações, das provações e das contradições.” São Padre Pio de Pietrelcina