Proverbios, 31
2. ¡No, hijo mío! ¡No, niño mío! ¡Tú, mi primogénito, al que pedí con tanto anhelo!
2. ¡No, hijo mío! ¡No, niño mío! ¡Tú, mi primogénito, al que pedí con tanto anhelo!
“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina