1. Los hijos de Judá, según sus familias, recibieron por suerte la siguiente parte: Desde la frontera de Edom hasta el desierto de Zin en dirección al sur.





“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina