Salmos, 61
2. ¡Dios mío, escucha mi clamor, atiende a mi plegaria!
2. ¡Dios mío, escucha mi clamor, atiende a mi plegaria!
El Salmo 61 es un Salmo de David en el que llora a Dios por ayuda y protección. David se siente abatido y distante de Dios, pero confía en su misericordia y poder para ayudarlo a superar sus problemas y fortalecerlo. Le pide a Dios que lo guíe a la roca más alta y que lo proteja bajo sus alas. Rastreando toda la Biblia, se encontraron cinco versos relacionados con los temas cubiertos en el Salmo 61, presentados a continuación en orden de proximidad a los temas del capítulo:
Salmos 27:5: "Porque el día de la adversidad me esconderá en su pabellón; en la imprudencia de su tabernáculo me esconderá; en una roca me criará". Este versículo muestra que David confía en Dios para protegerlo y ocultarlo durante sus adversidades.
Salmo 91:4: "Con tus plumas te cubrirán, y debajo de tus alas tomarás refugio; tu verdad será tu escudo y broche". Este versículo presenta la imagen de Dios protegiendo y cubriendo con sus alas a quienes confían en él, como David.
Salmo 62:7: "En Dios está mi salvación y mi gloria; la roca de mi fortaleza y mi refugio están en Dios". David confía en Dios para ser su roca, su fortaleza y refugio.
Salmos 31:3: "Porque eres mi roca y mi fortaleza; entonces, por el bien de tu nombre, guíame y reenvíame". Este versículo muestra que David confía en Dios como su roca y fortaleza, y pregunta su orientación.
Salmo 46:1: "Dios es nuestro refugio y fortaleza, una buena ayuda en la angustia". Este versículo presenta a Dios como refugio y fortaleza para aquellos que necesitan ayuda en tiempos de angustia, que es exactamente lo que David busca en el Salmo 61.
“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina