7. Todos los hombres de Israel que estaban en el valle, al ver que la gente huía y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron sus ciudades y se dieron a la fuga. Luego vinieron los filisteos y se establecieron allí.





“O amor nada mais é do que o brilho de Deus nos homens”. São Padre Pio de Pietrelcina