Löydetty 134 Tulokset: cambio

  • A tu pueblo, en cambio, le diste alimento de ángeles, le procuraste desde el cielo un pan preparado sin trabajo por su parte, capaz de dar todo placer y acomodado al gusto de cada uno. (Sabiduría 16, 20)

  • En cambio, este mismo fuego se olvidaba de su propia fuerza, para que los justos se alimentaran; (Sabiduría 16, 23)

  • Una luz espléndida brillaba, en cambio, para tus santos. Los egipcios, que oían su voz sin ver su figura, los proclamaban dichosos, aunque primero hubiesen padecido; (Sabiduría 18, 1)

  • Con mujer no trates de su rival, ni con un cobarde de la guerra, ni con negociante sobre el cambio, ni con comprador acerca de la venta, ni con envidioso de gratitud, ni con egoísta de generosidad, ni con perezoso de trabajo alguno, ni con el obrero eventual acerca del fin de su trabajo, ni con el criado perezoso acerca de una gran tarea: en todos estos no te apoyes para buscar consejo. (Eclesiástico 37, 11)

  • Dejará sentir su ira sobre las naciones, como cambió las aguas en salitre. (Eclesiástico 39, 23)

  • Conoce el buey a su señor y el asno el pesebre de su amo. Israel, en cambio, no conoce; mi pueblo no comprende. (Isaías 1, 3)

  • ¡Cómo se ha prostituido la ciudad fiel, Sión, tan llena de justicia! Moraba en ella el derecho; ¡ahora, en cambio, asesinos! (Isaías 1, 21)

  • Pues la mano del Señor reposa sobre esta montaña. Moab, en cambio, es pisoteado en su sitio, como se pisa la paja en el muladar. (Isaías 25, 10)

  • En cambio, el noble sólo nobleza guarda, y a nobles empresas se entrega. (Isaías 32, 8)

  • Porque yo soy el Señor, tu Dios, el Santo de Israel, tu salvador. Como precio de tu rescate entrego a Egipto, Etiopía y Sabá a cambio tuyo. (Isaías 43, 3)

  • Porque mucho vales a mis ojos, eres precioso y yo te amo. Por eso a cambio tuyo entrego hombres y pueblos por el rescate de tu vida. (Isaías 43, 4)

  • Pues tus escombros y tus ruinas y tu tierra devastada serán ahora demasiado estrechos para tus habitantes; tus destructores, en cambio, estarán lejos. (Isaías 49, 19)


“Temos muita facilidade para pedir, mas não para agradecer”. São Padre Pio de Pietrelcina