Löydetty 746 Tulokset: Espíritu Santo

  • Pero Moisés le respondió: "¿Así que te pones celoso por mí?¡Ojalá que todo el pueblo de Yavé fuera profeta, que Yavé les diera a todos su espíritu!" (Números 11, 29)

  • Pero a mi servidor Caleb lo haré entrar a esa tierra a la que ya entró, y se la daré a su posteridad, porque tuvo un espíritu distinto y me siguió sin vacilar. (Números 14, 24)

  • Esos hombres a los que Moisés había enviado para que exploraran la tierra y que, a su regreso, habían alzado a toda la comunidad en contra de él hablando mal del país, esos hombres que habían criticado a ese país con un mal espíritu, murieron de un golpe en presencia de Yavé. (Números 14, 36)

  • Cuando Balaam levantó la vista, vio a Israel agrupado por tribus; entonces el espíritu de Dios se apoderó de él. (Números 24, 2)

  • Yavé respondió a Moisés: «Llama a Josué, hijo de Nun, hombre en que está el Espíritu, y pon tu mano sobre él. (Números 27, 18)

  • Harás la libación de vino puro, delante de Yavé en el lugar santo: un cuarto de sextario por cada cordero. (Números 28, 7)

  • Salvará a este hombre de la mano del vengador de la sangre y lo hará volver a la ciudad de asilo en la que se refugió. Allí vivirá hasta la muerte del sumo sacerdote ungido con el óleo santo. (Números 35, 25)

  • ¡Ojalá que siempre tengan el mismo espíritu, me teman y guarden todos mis preceptos!, pues entonces les iría bien a ellos y a sus hijos eternamente. (Deuteronomio 5, 29)

  • Pues tú eres un pueblo santo y consagrado a Yavé, tu Dios. Yavé te ha elegido de entre todos los pueblos que hay sobre la faz de la tierra, para que seas su propio pueblo. (Deuteronomio 14, 2)

  • Yavé hará de ti su pueblo santo, como te ha jurado si tú guardas sus mandamientos y sigues sus caminos. (Deuteronomio 28, 9)

  • Porque yo conozco su espíritu rebelde y su cabeza dura. Si hoy, que vivo yo entre ustedes, son rebeldes a Yavé, ¿cuánto más lo serán después de mi muerte? (Deuteronomio 31, 27)

  • Pero tenían a Josué, hijo de Nun, el cual quedó lleno del espíritu de sabiduría porque Moisés había puesto sus manos sobre él. Los hijos de Israel le obedecieron y actuaron en todo según Yavé había ordenado a Moisés. (Deuteronomio 34, 9)


“Sigamos o caminho que nos conduz a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina