Fundar 162 Resultados para: tras
Entonces tomó a sus hermanos consigo y tras siete jornadas de persecución a su zaga le dio alcance en la montaña de Galaad. (Génesis 31, 23)
El mismo encargo hizo también al segundo, como asimismo al tercero y a todos los que iban tras las manadas diciendo: «En estos términos hablaréis a Esaú cuando le encontréis, (Génesis 32, 20)
añadiendo: "Precisamente, tu siervo Jacob viene detrás de nosotros."» Pues se decía: «Voy a ganármelo con el regalo que me precede, tras de lo cual me entrevistaré con él; tal vez me haga buena cara.» (Génesis 32, 21)
Ella insistía en hablar a José día tras día, pero él no accedió a acostarse y estar con ella. (Génesis 39, 10)
Sucedió tras esto que se le dijo a José: «Mira que tu padre está malo.» Entonces él tomó consigo a sus dos hijos Manasés y Efraím, (Génesis 48, 1)
Dijo Yahveh a Moisés: «Todavía traeré una plaga más sobre Faraón y sobre Egipto; tras de lo cual os dejará marchar de aquí y cuando, por fin, os deje salir del país, él mismo os expulsará de aquí. (Exodo 11, 1)
Al acercarse Faraón, los israelitas alzaron sus ojos, y viendo que los egipcios marchaban tras ellos, temieron mucho los israelitas y clamaron a Yahveh. (Exodo 14, 10)
Los egipcios se lanzaron en su persecución, entrando tras ellos, en medio del mar, todos los caballos de Faraón, y los carros con sus guerreros. (Exodo 14, 23)
No hagas pacto con los moradores de aquella tierra, no sea que cuando se prostituyan tras sus dioses y les ofrezcan sacrificios, te inviten a ti y tú comas de sus sacrificios; (Exodo 34, 15)
y no sea que tomes sus hijas para tus hijos, y que al prostituirse sus hijas tras sus dioses, hagan también que tus hijos se prostituyan tras los dioses de ellas. (Exodo 34, 16)
Nadab y Abihú, hijos de Aarón, tomaron cada uno su incensario, pusieron fuego en ellos y, tras echar incienso encima, ofrecieron ante Yahveh un fuego profano, que él no les había mandado. (Levítico 10, 1)
y el sacerdote saldrá fuera del campamento; si, tras de haberlo examinado, comprueba que el leproso está ya curado de la llaga de lepra, (Levítico 14, 3)
