Fundar 1016 Resultados para: medio-hermano

  • Si mandas a nuestro hermano con nosotros, bajaremos y te compraremos víveres; (Génesis 43, 4)

  • pero si no le mandas, no bajamos, porque aquel hombre nos dijo: "No os presentéis a mí si no está vuestro hermano con vosotros."» (Génesis 43, 5)

  • Dijo Israel: «¿Por qué para desgracia mía hicisteis saber a ese hombre que teníais otro hermano?» (Génesis 43, 6)

  • Dijeron: «!El empezó preguntándonos por nuestra familia, diciéndonos: ¿Tenéis aún padre? ¿Vive todavía vuestro padre? ¿Tenéis algun otro hermano? Y nosotros nos limitamos a responder a sus palabras. ¿Podíamos saber que iba a decirnos: Bajad a vuestro hermano?» (Génesis 43, 7)

  • Tomad, pues, a vuestro hermano y volved inmediatamente donde ese hombre; (Génesis 43, 13)

  • que El Sadday os haga hallar misericordia ante ese hombre, y que él os despache y suelte a vuestro otro hermano, y a Benjamín. Por mi parte, si he de perder a mis hijos, qué le vamos a hacer.» (Génesis 43, 14)

  • Entonces José volvió los ojos y vio a Benjamín, su hermano de madre, y dijo: «¿Este es vuestro hermano menor, de quien me hablasteis?» Y añadió: «Dios te guarde, hijo mío.» (Génesis 43, 29)

  • José tuvo que darse prisa, porque le daban ganas de llorar de emoción por su hermano, y entrando en el cuarto lloró allí. (Génesis 43, 30)

  • Mi señor preguntó a sus siervos: "¿Tenéis padre o algún hermano?" (Génesis 44, 19)

  • Y nosotros dijimos a mi señor: «"Sí, tenemos padre anciano, y un hijo pequeño de su ancianidad. Otro hermano de éste murió; sólo le ha quedado éste de su madre, y su padre le quiere." (Génesis 44, 20)

  • Pero dijiste a tus siervos: "Pues si no baja vuestro hermano menor con vosotros, no volveréis a verme la cara." (Génesis 44, 23)

  • Dijimos: "No podemos bajar, a menos que nuestro hermano pequeño vaya con nosotros. En ese caso sí bajaríamos. Porque no podemos presentarnos a aquel hombre si no está con nosotros nuestro hermano el pequeño." (Génesis 44, 26)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina