Fundar 81 Resultados para: Treinta

  • Asahel, hermano de Joab, estaba entre los Treinta. Eljanán, hijo de Dodó, de Belén. (II Samuel 23, 24)

  • Los víveres de Salomón eran treinta cargas de flor de harina y sesenta cargas de harina cada día, (I Reyes 5, 2)

  • Edificó la Casa «Bosque del Líbano», de cien codos de longitud, cincuenta codos de anchura y treinta codos de altura, sobre cuatro filas de columnas de cedro; había capiteles de cedro sobre las columnas. (I Reyes 7, 2)

  • Hizo el Pórtico de las columnas de cincuenta codos de longitud, treinta codos de anchura... con un pórtico por delante. (I Reyes 7, 6)

  • Hizo el Mar de metal fundido que tenía diez codos de borde a borde; era enteramente redondo, y de cinco codos de altura; un cordón de treinta codos medía su contorno. (I Reyes 7, 23)

  • Debajo del borde había calabazas todo en derredor; daban vuelta al Mar a largo de treinta codos; había dos filas de calabazas fundidas en una sola pieza. (I Reyes 7, 24)

  • Ezequías, rey de Judá, envió a decir a Senaquerib a Lakís: «He pecado; deja de atacarme, y haré cuanto me digas.» El rey de Asiria impuso a Ezequías, rey de Judá, trescientos talentos de plata y treinta talentos de oro. (II Reyes 18, 14)

  • Esta es la lista de los héroes que tenía David: Yasobam, hijo de Jakmoní, jefe de los Treinta, que blandió su lanza e hizo más de trescientas bajas de una sola vez. (I Crónicas 11, 11)

  • Tres de los Treinta bajaron a la peña de la cueva de Adullam, donde David, cuando los filisteos se hallaban acampados en el valle de los Refaím. (I Crónicas 11, 15)

  • Abisay, hermano de Joab, era el primero de los Treinta. Hirió con su lanza a trescientos hombres, y conquistó renombre entre los Treinta. (I Crónicas 11, 20)

  • Fue más afamado que los Treinta, llegando a ser su capitán; pero no igualó a los Tres. (I Crónicas 11, 21)

  • Fue muy famoso entre los Treinta, pero no igualó a los Tres; David le hizo jefe de su guardia personal. (I Crónicas 11, 25)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina