Fundar 3452 Resultados para: Asa
Jacob dijo a Labán: «Dame mi mujer, que se ha cumplido el plazo, y quiero casarme con ella.» (Génesis 29, 21)
El se unió también a Raquel, y amó a Raquel más que a Lía, y sirvió en casa de su tío otros siete años más. (Génesis 29, 30)
bien poca cosa tenías antes de venir yo, pero ya se ha multiplicado muchísimo, y Yahveh te ha bendecido a mi llegada. Pues bien: ¿cuándo voy a hacer yo también algo por mi casa?» (Génesis 30, 30)
Respondieron Raquel y Lía y le dijeron: «¿Es que tenemos aún parte o herencia en la casa de nuestro padre? (Génesis 31, 14)
Así pues, tú te has marchado porque añorabas la casa paterna, pero ¿por qué robaste mis dioses?» (Génesis 31, 30)
Al registrar todos mis enseres, ¿qué has hallado de todos los enseres de tu casa? Ponlo aquí, ante mis hermanos y los tuyos, y juzguen ellos entre nosotros dos. (Génesis 31, 37)
Estos fueron mis veinte años en tu casa. Catorce años te serví por tus dos hijas, y seis por tus ovejas, y tú has cambiado mi paga diez veces. (Génesis 31, 41)
Testigo sea este majano, y testigo sea esta estela de que yo no he de traspasar este majano hacia ti, ni tú has de traspasar este majano y esta estela hacia mí para nada malo. (Génesis 31, 52)
encargándolles: «Diréis a mi señor Esaú: Así dice tu siervo Jacob: Fui a pasar una temporada con Labán, y me he demorado hasta hoy. (Génesis 32, 5)
y repartíendolo en manadas independientes, los confió a sus siervos y les dijo: «Pasad delante de mí, dejando espacio entre manada y manada.» (Génesis 32, 17)
Les tomó y les hizo pasar el río, e hizo pasar también todo lo que tenía. (Génesis 32, 24)
El sol salió así que hubo pasado Penuel, pero él cojeaba del muslo. (Génesis 32, 32)