Fundar 1155 Resultados para: después

  • Más le hubiera valido no conocer el camino de la justicia que, después de haberlo conocido, apartarse del santo mandamiento que le fue transmitido. (II Pedro 2, 21)

  • Quiero recordarles, aunque ustedes ya lo han aprendido de una vez por todas, que el Señor, después de haber salvado al pueblo, sacándolo de Egipto, hizo morir en seguida a los incrédulos. (Judas 1, 5)

  • A ellos se refería Henoc, el séptimo patriarca después de Adán, cuando profetizó: «Ya viene el Señor con sus millares de ángeles, (Judas 1, 14)

  • Después tuve la siguiente visión: Había una puerta abierta en el cielo, y la voz que había escuchado antes, hablándome como una trompeta, me dijo: «Sube aquí, y te mostraré las cosas que deben suceder en seguida». (Apocalipsis 4, 1)

  • Después vi en la mano derecha de aquel que estaba sentado en el trono, un libro escrito por dentro y por fuera, y sellado con siete sellos. (Apocalipsis 5, 1)

  • Y después oí la voz de una multitud de Ángeles que estaban alrededor del trono, de los Seres Vivientes y de los Ancianos. Su número se contaba por miles y millones, (Apocalipsis 5, 11)

  • Después vi que el Cordero abría el primero de los siete sellos, y oí al primero de los cuatro Seres Vivientes que decía con voz de trueno: «Ven». (Apocalipsis 6, 1)

  • Después de esto, vi a cuatro Ángeles que estaban de pie en los cuatro puntos cardinales y sujetaban a los cuatro vientos para que no soplaran sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre los árboles. (Apocalipsis 7, 1)

  • Después de esto, vi una enorme muchedumbre, imposible de contar, formada por gente de todas las naciones, familias, pueblos y lenguas. Estaban de pie ante el trono y delante del Cordero, vestidos con túnicas blancas; llevaban palmas en la mano y exclamaban con voz potente: (Apocalipsis 7, 9)

  • Después el Ángel tomó el incensario, lo llenó con el fuego del altar y lo arrojósobre la tierra. Y hubo truenos, gritos, relámpagos y un temblor de tierra. (Apocalipsis 8, 5)

  • Y después vi y oí a un águila que volaba en el cielo y decía con voz potente: «¡Ay de los habitantes de la tierra, cuando resuenen las trompetas que ya se disponen a tocar los otros tres Ángeles!». (Apocalipsis 8, 13)

  • Después recibí una vara para medir, semejante a un bastón, mientras me decían: «Levántate y mide el Templo de Dios, el altar y a los adoradores que encuentres allí. (Apocalipsis 11, 1)


“Que Maria sempre enfeite sua alma com as flores e o perfume de novas virtudes e coloque a mão materna sobre sua cabeça. Fique sempre e cada vez mais perto de nossa Mãe celeste, pois ela é o mar que deve ser atravessado para se atingir as praias do esplendor eterno no reino do amanhecer.” São Padre Pio de Pietrelcina