Fundar 307 Resultados para: prueba de las aguas amargas

  • pues Yavé, nuestro Dios, secó las aguas del Jordán delante de nosotros, lo mismo que hizo en el mar Rojo, que dejó seco ante nosotros cuando tuvimos que atravesarlo. (Josué 4, 23)

  • Después la frontera subía a Dabir en el valle de Acor, y al norte daba la vuelta hacia Guilgal, la cual está enfrente de la subida de Adomim, está al sur del Torrente; después que frontera pasaba por las aguas llamadas Fuente del Sol, llegando a la Fuente de Rogel. (Josué 15, 7)

  • Por el sur, la frontera empieza desde Cariatiarim, y dirigiéndose al oeste llega hasta la fuente de las aguas de Neftoa, (Josué 18, 15)

  • sino como una prueba entre nosotros y ustedes, entre nuestra descendencia y la de ustedes, de que somos también servidores de Yavé y tenemos derecho a ofrecer holocaustos y víctimas pacíficas; lo hicimos para que los hijos de ustedes no puedan decir a los nuestros: Ustedes no tienen parte con Yavé. (Josué 22, 27)

  • Vinieron los reyes al combate, combatieron los reyes de Canaán, en Tanac, junto a las aguas de Meguido, pero no recogieron plata. (Jueces 5, 19)

  • Gedeón habló de nuevo a Dios y le dijo: «No te enojes conmigo si me atrevo otra vez a hablarte. Por favor, quisiera hacer otra vez la prueba con el vellón: que quede seco sólo el vellón y que haya rocío por todo el suelo.» (Jueces 6, 39)

  • Era entonces costumbre en Israel que para confirmar cualquier negocio, como rescate o cambio, una de las partes se sacara su sandalia y se la diera al otro. Y este gesto servía como prueba del contrato. (Rut 4, 7)

  • y además había tantos ratones de oro como ciudades filisteas bajo la autoridad de los cinco jefes, desde las ciudades fortificadas hasta las aldeas que no tienen muros. Prueba de esto, hasta el día de hoy, es la gran piedra en la que se colocó el Arca de Yavé, que está en el campo de Josué de Bet-Semes. (1 Samuel 6, 18)

  • Extiende su mano desde lo alto y me toma, me saca de las profundas aguas. (2 Samuel 22, 17)

  • Tomó entonces Elías su manto, lo enrolló y golpeó las aguas, que se apartaron por ambos lados, y atravesaron en seco por medio del río. (2 Reyes 2, 8)

  • Golpeó las aguas con el manto, pero no se dividieron las aguas. Entonces exclamó: «¿Dónde esta Yavé, el Dios de Elías?» Y, como golpeara las aguas, se dividieron y pasó Eliseo. (2 Reyes 2, 14)

  • Los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo: «La ubicación de esta ciudad es buena, como mi señor puede ver, pero las aguas son malas, y por eso el lugar es muy insalubre.» (2 Reyes 2, 19)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina