Fundar 760 Resultados para: nuevo corazón

  • Y en seguida empezó a latirle fuerte el corazón por haberle cortado la punta del manto de Saúl, (1 Samuel 24, 6)

  • tú, señor, no tendrás este pesar y remordimiento en el corazón de haber derramado sangre inocente y haberte vengado por tu propia mano. Entonces Yavé te bendecirá y tú también te acordarás de mí, tu sierva.» (1 Samuel 25, 31)

  • Por la mañana, una vez que se le hubo pasado la borrachera, le contó su esposa todo lo sucedido. Le vino un ataque al corazón y quedó paralizado. (1 Samuel 25, 37)

  • Por eso mañana levántense antes del amanecer, y con todos los que vinieron contigo vayan al lugar que les he asignado. No guardes, pues, rencor en tu corazón, porque tú sabes que te estimo. Levántense, pues, muy temprano y partan apenas aclare.» (1 Samuel 29, 10)

  • David reunió de nuevo a todo lo mejor de Israel, unos treinta mil hombres. (2 Samuel 6, 1)

  • Cuando el Arca de Yavé entró en la ciudad de David, Micol, hija de Saúl, estaba mirando por la ventana. Vio al rey David saltando y danzando, en presencia de Yavé, y lo despreció en su corazón. (2 Samuel 6, 16)

  • David dijo a su jefe, Itaí: «No vengas con nosotros, vuelve y quédate con el nuevo rey. Eres un extranjero, (2 Samuel 15, 19)

  • Joab le respondió: «No tengo tiempo que perder contigo.»Y yendo al árbol de donde colgaba Absalón, le clavó personalmente tres dardos en el corazón, cuando aún estaba vivo. (2 Samuel 18, 14)

  • De nuevo hubo guerra entre los filisteos e Israel. David con sus servidores bajaron y a atacaron a los filisteos. (2 Samuel 21, 15)

  • Yavé se enojó de nuevo contra los israelitas. Movió a David a que hiciera el censo de Israel y Judá. (2 Samuel 24, 1)

  • David sintió latir su corazón cuando hubo hecho el censo y dijo a Yavé: «He pecado grandemente por lo que hice, ¡oh Yavé! Perdona, te ruego, mi falta, pues he cometido una locura.» (2 Samuel 24, 10)

  • En vista de todo esto, Natán fue a decirle a Betsabé, madre de Salomón: «¿No sabes que tenemos un nuevo rey, Adonías, hijo de Jaguit? Y el rey no tiene ni idea de esto. (1 Reyes 1, 11)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina