Fundar 1991 Resultados para: hijos

  • Escuchen lo que sucederá en los últimos días, dice Dios: derramaré mi Espíritu sobre cualesquiera que sean los mortales. Sus hijos e hijas profetizarán, los jóvenes tendrán visiones y los ancianos tendrán sueños proféticos. (Hecho de los Apóstoles 2, 17)

  • Porque el don de Dios es para ustedes y para sus hijos, y también para todos aquellos a los que el Señor, nuestro Dios, quiera llamar, aun cuando se hayan alejado.» (Hecho de los Apóstoles 2, 39)

  • Ustedes son los hijos de los profetas y los herederos de la alianza que Dios pactó con nuestros padres, al decir a Abrahán: A través de tu descendencia serán bendecidas todas las familias de la tierra. (Hecho de los Apóstoles 3, 25)

  • Y no le dio en él propiedad alguna, ni siquiera un pedacito de tierra donde poner el pie, sino que le prometió dárselo en posesión a él y a su descendencia después de él. Se lo dijo a pesar de que no tenía hijos. (Hecho de los Apóstoles 7, 5)

  • Sus cuerpos fueron llevados a Siquem y descansan en la tumba que Abrahán había comprado en Siquem a los hijos de Hamorpor cierta suma de plata. (Hecho de los Apóstoles 7, 16)

  • Este rey, actuando con astucia contra nuestra raza, obligó a nuestros padres a que abandonaran a sus hijos recién nacidos para que no tuvieran más familia. (Hecho de los Apóstoles 7, 19)

  • Al oír esto Moisés huyó y fue a vivir en la tierra de Madián, donde tuvo dos hijos. (Hecho de los Apóstoles 7, 29)

  • David agradó a Dios y quiso darle un lugar donde descansara entre los hijos de Jacob. (Hecho de los Apóstoles 7, 46)

  • Pablo, pues, se levantó, hizo señal con la mano pidiendo silencio y dijo: «Hijos de Israel y todos ustedes que temen a Dios, escuchen: (Hecho de los Apóstoles 13, 16)

  • Hermanos israelitas, hijos y descendientes de Abrahán, y también ustedes los que temen a Dios, a todos nosotros se nos ha dirigido este mensaje de salvación. (Hecho de los Apóstoles 13, 26)

  • y que cumplió para nosotros, sus hijos, al resucitar a Jesús, como está escrito en el Salmo: Tú eres mi hijo, yo te he engendrado hoy. (Hecho de los Apóstoles 13, 33)

  • Entre los que hacían esto estaban los hijos de un sacerdote judío, llamado Escevas. Un día entraron en una casa y se atrevieron a hacer eso, (Hecho de los Apóstoles 19, 14)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina