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Entonces darás a los sacerdotes levitas que son descendientes de Sadoc y que se acercan a mí para servirme, palabra de Yavé, un novillo para la expiación. (Ezequiel 43, 19)
El segundo día ofrecerás un chivo sin defecto como expiación, y se hará la expiación por el altar como se hizo con el novillo. (Ezequiel 43, 22)
Luego cuando hayas terminado la expiación, ofrecerás un novillo sin defecto y un carnero sin defecto sacado del rebaño. (Ezequiel 43, 23)
Durante siete días ofrecerás diariamente un chivo como expiación; se sacrificará igualmente un novillo y un carnero sacado del rebaño. (Ezequiel 43, 25)
Esto dice Yavé: El primer día del primer mes tomarás un novillo sin defecto para borrar el pecado del Santuario. (Ezequiel 45, 18)
El día de la luna nueva ofrecerá un novillo, seis corderos y un carnero sin defecto. (Ezequiel 46, 6)
Junto con el novillo ofrecerá harina, una medida por el carnero y lo que quiera por los corderos; añadirá un sexto de medida de aceite. (Ezequiel 46, 7)
Con ocasión de las fiestas y de las solemnidades, el príncipe ofrecerá por el novillo una medida de harina, otra por el carnero y lo que quiera por los corderos. (Ezequiel 46, 11)
Gritando, mandó llamar a los brujos y adivinos y les dijo: «Al que entienda esta letra y me la explique, lo haré vestir de rojo, color reservado para el rey, y le pondré al cuello un collar de oro y gobernará la tercera parte del reino. (Daniel 5, 7)
Entonces Belsasar ordenó que le pusieran un vestido rojo, color reservado para el rey, y un collar de oro, e hizo proclamar que le asignaba el tercer puesto en el reino (Daniel 5, 29)
Sus valientes llevan el escudo rojo, sus guerreros están vestidos de púrpura. Los carros alistados brillan como antorchas y sus hombres llevan el casco. (Nahún 2, 4)
«He tenido una visión esta noche: Había un hombre montado en un caballo rojo que estaba entre medio de los arrayanes, de raíces muy profundas. Lo seguían caballos rojos, alazanes, negros y blancos.» Yo entonces pregunté «¿Qué son éstos, Señor?» (Zacarías 1, 8)