Fundar 28 Resultados para: Amenaza

  • Almacenaron armas y alimentos, y reunieron en ella todo lo que pudieron recoger en la ciudad, llegando a ser una constante amenaza. (1 Macabeos 1, 35)

  • Fue una asechanza para el Santuario, una grave y continua amenaza para Israel. (1 Macabeos 1, 36)

  • Si una guerra amenaza a los romanos primero, o a alguno de sus aliados en todo su imperio, (1 Macabeos 8, 24)

  • Pero El las amenaza, y de muy lejos huyen, como polvillo de los cerros movido por el viento, o como un remolino, por el huracán. (Isaías 17, 13)

  • Todos tus jefes huyeron juntos y se rindieron bajo la amenaza de los arcos; tus valientes se dieron a la fuga, pero fueron apresados. (Isaías 22, 3)

  • este pecado será para ustedes como una grieta que aparece en una alta muralla. Se agranda y amenaza, hasta que, de repente, de un golpe, se derrumbe la muralla. (Isaías 30, 13)

  • Mil huirán ante la amenaza de uno solo, y ante el ataque de cinco todos ustedes huirán; y sólo sobrevivirá de ustedes un resto, como un poste en la cumbre de un cerro o como un palo de bandera en una colina. (Isaías 30, 17)

  • Cuando tú anuncies a este pueblo todas estas cosas, te preguntarán: «¿Por qué nos amenaza Yavé con estas enormes desgracias? ¿Qué crimen o qué pecado hemos cometido contra Yavé, nuestro Dios?» (Jeremías 16, 10)

  • Ahora bien, corrijan su conducta y mejoren sus obras, escuchen la voz de Yavé, y él no ejecutará el mal con que los amenaza. (Jeremías 26, 13)

  • ¿No es Efraím para mí un hijo predilecto, o un niño mimado, para que después de cada amenaza deba siempre pensar en él, y por él se conmuevan mis entrañas y se desborde mi ternura? -palabra de Yavé. (Jeremías 31, 20)

  • Si ve que la espada amenaza al lugar, toca el cuerno y le avisa al pueblo. (Ezequiel 33, 3)

  • Pero si el vigía ve que amenaza la espada y no toca el cuerno, si el pueblo no es avisado y llega a matar la espada a alguien del pueblo, ese será segado debido a su pecado, pero le pediré al centinela cuenta de su sangre. (Ezequiel 33, 6)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.” São Padre Pio de Pietrelcina