6. Sí, acuérdate de él antes que se corte la hebra de plata y se quiebre la ampolla de oro, antes que se haga pedazos el cántaro en la fuente y se rompa la cuerda del aljibe;





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina