17. Vosotros cansáis al Señor con vuestras palabras, y sin embargo decís: "¿En qué le hemos cansado?". Con esto afirmáis: "Todo el que hace el mal es bien visto por el Señor y él lo acepta complacido", o "¿dónde está el Dios de la justicia?".





“Não abandone sua alma à tentação, diz o Espírito Santo, já que a alegria do coração é a vida da alma e uma fonte inexaurível de santidade.” São Padre Pio de Pietrelcina