Salmos, 29
9. La voz del Señor retuerce las encinas, el Señor arrasa las selvas. En su Templo, todos dicen: "¡Gloria!".
9. La voz del Señor retuerce las encinas, el Señor arrasa las selvas. En su Templo, todos dicen: "¡Gloria!".
El Salmo 29 es una canción de culto que ensalza la majestad y el poder de Dios manifestado en la naturaleza, especialmente en la tormenta. Los siguientes son cinco versos de otros libros bíblicos que se relacionan con los temas cubiertos en el Salmo 29.
Job 38:25-27: "¿Quién ha abierto canales a los torrentes de la inundación, y un camino hacia el rayo del trueno, para regar el desierto y la tierra árida, y para cultivar la hierba?" Este versículo es parte del discurso de Dios a Job, en el que le recuerda que él es el creador y sostenedor de la naturaleza. La referencia al trueno y la lluvia se conecta con la descripción de la tormenta en el Salmo 29.
Isaías 30:30: "Y el Señor escuchará su majestuosa voz, y verá la bajada de su brazo, con una ardiente indignación y hojuelas de fuego del consumidor, con torbellinos, tormentas y piedra de Saraiva". Este versículo habla del juicio de Dios sobre el pueblo de Israel, que vendrá con tormenta y fuego. El lenguaje de Storm and Thunder nuevamente se relaciona con el Salmo 29.
Jeremías 10:13: "Cuando triunfa, las aguas rugen los cielos; levanta las nubes de los fines de la tierra, hace rayos a la lluvia y hace el viento de sus tesoros". Este versículo describe el poder y la autoridad de Dios sobre la naturaleza, incluido el trueno y la lluvia. Nuevamente, estos elementos se conectan con la tormenta descrita en el Salmo 29.
Ezequiel 1:24: "Y cuando caminaron, se escuchó el ruido de sus alas, como el ruido de muchas aguas, como la voz del omnipotente, un golpe como el ruido de un ejército que se mueve; y, deteniéndolos, bajó tu alas. " Este versículo describe una visión del profeta Ezequiel, en la que ve criaturas celestiales con alas que hacen un sonido similar al de las aguas y la voz de Dios. El sonido de las aguas es otra imagen que aparece en el Salmo 29.
Apocalipsis 4:5-6: "Y el trono salió de las escaleras, voces y truenos; antes del trono, quemaron siete lámparas de fuego, que son los siete espíritus de Dios; y antes del trono había un mar de vidrio, similar a el cristal ". Este versículo describe la visión de Juan del trono de Dios en el cielo, rodeado de poderosos fenómenos naturales, que incluyen truenos y un mar de vidrio. La imagen del trono y el trueno se relaciona con el tema de Dios como el gobernante soberano y poderoso presentado en el Salmo 29.
“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina
