Gefunden 61 Ergebnisse für: Felices

  • Pues bien, ustedes ya saben estas cosas: felices si las ponen en práctica. (Evangelio según San Juan 13, 17)

  • Jesús replicó: «Crees porque me has visto. ¡Felices los que no han visto, pero creen!» (Evangelio según San Juan 20, 29)

  • Felices aquellos cuyos pecados han sido perdonados, y cuyas ofensas han sido olvidadas. (Carta a los Romanos 4, 7)

  • Y también ustedes han de sentirse felices y alegrarse conmigo. (Carta a los Filipenses 2, 18)

  • Fíjense que llamamos felices a aquellos que fueron capaces de perseverar. Han oído hablar de la constancia de Job y saben lo que al final el Señor hizo por él, pues el Señor es compasivo y misericordioso. (Carta de Santiago 5, 11)

  • El que de veras quiera gozar la vida y vivir días felices, guarde su lengua del mal y que de su boca no salgan palabras engañosas. (1º Carta de Pedro 3, 10)

  • Felices ustedes si incluso tienen que sufrir por haber actuado bien. No compartan sus temores ni se asusten, (1º Carta de Pedro 3, 14)

  • Si son insultados a causa del nombre de Cristo, felices ustedes, porque la gloria y el Espíritu de Dios descansan sobre ustedes. (1º Carta de Pedro 4, 14)

  • y recibirán lo merecido por su maldad. Se sienten felices por gozar placeres pasajeros. Gente sucia y viciosa, que se aprovechan de ustedes y se portan como glotones en sus comidas fraternas. (2º Carta de Pedro 2, 13)

  • Feliz el que lea en público estas palabras proféticas y felices quienes las escuchen y hacen caso de este mensaje, porque el tiempo está cerca. (Apocalipsis 1, 3)

  • Entonces oí una voz que decía desde el cielo: «Escribe esto: Felices desde ahora los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, que descansen de sus fatigas, pues sus obras los acompañan.» (Apocalipsis 14, 13)

  • Después el ángel me dijo: «Escribe: Felices los que han sido invitados al banquete de bodas del Cordero.» Y añadió: «Estas son palabras verdaderas de Dios.» (Apocalipsis 19, 9)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina