12. Sus ojos son llamas de fuego, tiene en la cabeza muchas coronas, y lleva escrito un nombre que sólo él entiende.





“Como Jesus, preparemo-nos a duas ascensões: uma ao Calvário e outra ao Céu. A ascensão ao Calvário, se não for alegre, deve ao menos ser resignada!” São Padre Pio de Pietrelcina