Encontrados 310 resultados para: profeta Eliseo

  • Y Eliseo ordenó al rey de Israel: "Pon tu mano en el arco". Él puso su mano, y Eliseo puso la suya sobre las manos del rey. (II Reyes 13, 16)

  • Y añadió: "Abre la ventana de oriente". El rey la abrió. Y Eliseo dijo: "Dispara". Y él disparó. Eliseo exclamó: "¡Flecha de victoria de parte del Señor! ¡Flecha de victoria sobre Siria! Derrotarás a Siria, en Afec, hasta el exterminio". (II Reyes 13, 17)

  • Y añadió: "Toma las flechas". Y las tomó. Eliseo entonces ordenó al rey de Israel: "Golpea el suelo". Lo golpeó tres veces, y se paró. (II Reyes 13, 18)

  • Eliseo murió y fue sepultado. Entrado el año, unas bandas de Moab hicieron correrías en el país; (II Reyes 13, 20)

  • y sucedió que mientras unos hombres estaban enterrando a un muerto, divisaron una banda, echaron al hombre en el sepulcro de Eliseo y escaparon. Apenas aquel hombre tocó los huesos de Eliseo, revivió y se puso en pie. (II Reyes 13, 21)

  • Él restableció las fronteras de Israel desde la entrada de Jamat hasta el mar de la Arabá, según el oráculo del Señor, Dios de Israel, pronunciado por medio de su siervo, el profeta Jonás, hijo de Amitay, que era de Gat Jéfer. (II Reyes 14, 25)

  • Y mandó a Eliaquín, el mayordomo, a Sebná, el secretario, y a los sacerdotes más ancianos, vestidos de saco, a decir al profeta Isaías, hijo de Amós: (II Reyes 19, 2)

  • Por aquel tiempo, Ezequías cayó gravemente enfermo; Isaías, hijo de Amós, el profeta, se presentó a él y le dijo: "Esto dice el Señor: Arregla los asuntos de tu casa, porque vas a morir; no curarás". (II Reyes 20, 1)

  • Entonces el profeta Isaías invocó al Señor, el cual hizo retroceder a la sombra los diez grados en el cuadrante de Acaz. (II Reyes 20, 11)

  • Pero el profeta Isaías se presentó al rey Ezequías y le dijo: "¿Qué han dicho estos hombres o de dónde han venido a ti?". Ezequías respondió: "Han venido de la lejana Babilonia". (II Reyes 20, 14)

  • Y él ordenó: "Dejadlo; que nadie remueva sus huesos". Así sus huesos fueron conservados junto con los huesos del profeta oriundo de Samaría. (II Reyes 23, 18)

  • Cuando David se estableció en su palacio, dijo al profeta Natán: "Yo estoy viviendo en una casa de cedro, mientras que el arca de la alianza del Señor está bajo una tienda". (I Crónicas 17, 1)


“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraquíssimo com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina