Encontrados 21 resultados para: parecía

  • José tuvo otro sueño, que contó también a sus hermanos: "He tenido otro sueño: me parecía que el sol, la luna y once estrellas se postraban ante mí". (Génesis 37, 9)

  • El Faraón le dijo: "En mi sueño me parecía estar junto al río, (Génesis 41, 17)

  • Después preguntó a Zébaj y Salmuná: "¿Cómo eran los hombres que matasteis en el Tabor?". Ellos respondieron: "Eran como tú; cada uno de ellos parecía un príncipe". (Jueces 8, 18)

  • En aquel tiempo no había rey en Israel; cada cual hacía lo que le parecía mejor. (Jueces 17, 6)

  • Ella dijo: "Que tu sierva alcance tu favor". La mujer se marchó, comió y bebió, y ya no parecía la de antes. (I Samuel 1, 18)

  • El pueblo supo esto y le pareció bien, pues todo lo que hacía el rey le parecía bien al pueblo. (II Samuel 3, 36)

  • Luego toda la gente subió tras él, tañendo flautas y con tan gran algazara que parecía que se iba a abrir la tierra con el vocerío. (I Reyes 1, 40)

  • lo llamó y le dijo: "¿No te juré yo por el Señor y te advertí seriamente que el día que salieras o te fueras a algún sitio, morirías sin remedio, y me respondiste que te parecía bien y que quedabas enterado? (I Reyes 2, 42)

  • Canción de las subidas Cuando el Señor repatrió a los prisioneros de Sión, nos parecía que estábamos soñando. (Salmos 126, 1)

  • En sus empresas parecía un león, como un cachorro que ruge ante su presa. (I Macabeos 3, 4)

  • Entonces Jasón hizo una matanza sin compasión en sus propios conciudadanos, olvidándose de que las victorias contra los de su propia nación son la mayor derrota; parecía que él no triunfaba de sus conciudadanos, sino de sus enemigos. (II Macabeos 5, 6)

  • Dios quiso que se apoderaran de la ciudad, y entonces hicieron tal carnicería que un lago vecino, de cuatrocientos metros de ancho, parecía lleno de sangre. (II Macabeos 12, 16)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina