Encontrados 74 resultados para: míos

  • Todos los primogénitos israelitas son míos, tanto hombres como animales; los reservé yo para mí el día en que herí a todos los primogénitos de Egipto; (Números 8, 17)

  • Ahora que me marcho con los míos, ven que te anuncie lo que este pueblo hará a tu pueblo en el futuro". (Números 24, 14)

  • Gedeón dijo: "Eran hermanos míos, hijos de mi madre. ¡Por la vida del Señor! ¡Si los hubieseis dejado vivos, yo no os mataría!". (Jueces 8, 19)

  • El dueño de la casa salió y les dijo: "No, hermanos míos, no hagáis semejante barbaridad, por favor. Ya que está en mi casa, no debéis hacer esta infamia. (Jueces 19, 23)

  • No, hijos míos, no es bueno lo que oigo de vosotros; vosotros hacéis pecar al pueblo del Señor. (I Samuel 2, 24)

  • "Esto dice Ben Hadad: Tu plata y tu oro son míos; tus mujeres y tus hijos a ti te pertenecen". (I Reyes 20, 3)

  • El rey se puso en pie y dijo: "Escuchadme, hermanos míos y pueblo mío. Yo tenía el deseo de construir un templo donde estuviera permanentemente el arca de la alianza del Señor, estrado de los pies de nuestro Dios; había hecho incluso preparativos para la construcción, (I Crónicas 28, 2)

  • Por tanto, hijos míos, no seáis negligentes, pues vosotros sois los elegidos del Señor para estar en su presencia, servirle, ser sus ministros y quemar incienso. (II Crónicas 29, 11)

  • Y ahora, hijos míos, os mando que sirváis a Dios sinceramente. Haced lo que a él le agrada, enseñad a vuestros hijos la justicia y la misericordia. Que se acuerden de Dios, de bendecir sinceramente su nombre en todo tiempo y con todas sus fuerzas. (Tobías 14, 8)

  • Tened, pues, presente, hijos míos, los efectos de la limosna y los de la injusticia, que conduce a la muerte. Siento que se me escapa la vida". Lo llevaron al lecho y murió. Fue enterrado solemnemente. (Tobías 14, 11)

  • pero eres tú, un hombre de los míos, mi familiar, mi amigo íntimo; (Salmos 55, 14)

  • Por eso, hijos míos, tened celo por la ley y ofreced vuestra vida por la alianza de vuestros padres. (I Macabeos 2, 50)


“A ingenuidade e’ uma virtude, mas apenas ate certo ponto; ela deve sempre ser acompanhada da prudência. A astúcia e a safadeza, por outro lado, são diabólicas e podem causar muito mal.” São Padre Pio de Pietrelcina