Encontrados 297 resultados para: haber
por haber menospreciado la palabra del Señor y haber traspasado su ley. Será extirpado y cargará con su pecado". (Números 15, 31)
El Señor dijo a Moisés y Aarón: "Por no haber creído en mí, manifestando mi santidad delante de los israelitas, no llevaréis vosotros a este pueblo a la tierra que yo les doy". (Números 20, 12)
Este pueblo se alza como leona, se yergue como un león; no se acuesta sin haber devorado su presa, sin haber bebido la sangre de sus víctimas". (Números 23, 24)
Será para él y para su descendencia un pacto que le asegurará el sacerdocio eternamente por haber sido celador de su Dios y haber obtenido el perdón para los israelitas. (Números 25, 13)
¿Por qué va a ser borrado el nombre de nuestro padre de en medio de su clan por no haber dejado hijos varones? Dadnos a nosotras una propiedad como a los hermanos de nuestro padre". (Números 27, 4)
Y dirás a los israelitas: Si un hombre muere sin haber dejado hijos, haréis pasar la herencia a su hija. (Números 27, 8)
todo lo que puede resistir el fuego, pasadlo por el fuego, y será puro después de haber sido lavado también con el agua de purificación. Lo que no resista al fuego, lavadlo con agua. (Números 31, 23)
Subieron hasta el valle de Escol y, después de haber visto la tierra, desanimaron a los israelitas para que no fuesen a la tierra que el Señor les daba. (Números 32, 9)
después de haber derrotado a Sijón, rey de los amorreos, que vivía en Jesbón, y a Og, rey de Basán, que vivía en Astarot y Edreí. (Deuteronomio 1, 4)
donde pudiera encontrar refugio el homicida que hubiera matado involuntariamente a su prójimo sin haber existido enemistad previa entre ellos; refugiándose en una de estas ciudades, podrá salvar su vida: (Deuteronomio 4, 42)
Por haber escuchado estos mandamientos, haberlos guardado y puesto en práctica, el Señor, tu Dios, mantendrá contigo la alianza y la misericordia que juró a tus padres. (Deuteronomio 7, 12)
Como las naciones que el Señor destruye a vuestro paso, así seréis destruidos vosotros por no haber escuchado la voz del Señor, vuestro Dios. (Deuteronomio 8, 20)