Encontrados 996 resultados para: guerreros de David

  • Pues esto dice el Señor: No le faltará jamás a David un descendiente que se siente en el trono de la casa de Israel, (Jeremías 33, 17)

  • entonces se podrá romper también mi alianza con mi siervo David, de suerte que no tenga hijos que reinen sobre su trono, así como con los sacerdotes levitas, mis ministros. (Jeremías 33, 21)

  • Como las innumerables estrellas de los cielos y las incontables arenas del mar, así multiplicaré yo la descendencia de mi siervo David y la de los levitas, mis ministros". (Jeremías 33, 22)

  • jamás rechazaré a la descendencia de Jacob y de David, mi siervo, ni dejaré de tomar de sus descendientes príncipes que gobiernen la posteridad de Abrahán, de Isaac y de Jacob. Pues voy a cambiar su suerte y a tener piedad de ellos. (Jeremías 33, 26)

  • Por ello, esto dice el Señor contra Joaquín, rey de Judá: No tendrá ya quien se siente sobre el trono de David, y su cadáver será arrojado al calor del día y al frío de la noche. (Jeremías 36, 30)

  • ¡Adelante, caballos! ¡Al asalto, carros! ¡Avanzad, guerreros, los etíopes y libios portadores de escudo, y los lidios, tiradores de arco! (Jeremías 46, 9)

  • Han sido tomadas las ciudades, ocupadas las fortalezas, y el corazón de los guerreros de Moab es en este día como el corazón de una mujer en parto. (Jeremías 48, 41)

  • Se remonta y planea como un águila y despliega sus alas sobre Bosra; el corazón de los guerreros de Edón será aquel día como el corazón de una mujer en parto. (Jeremías 49, 22)

  • Sí, en sus plazas caerán sus jóvenes, y todos sus guerreros perecerán aquel día -dice el Señor omnipotente-. (Jeremías 49, 26)

  • Pues ved que yo suscito y lanzo contra Babilonia una coalición de grandes pueblos, que llegan del norte. Caerán sobre ella, y por allí será conquistada. Sus flechas, como de expertos guerreros, no caerán en el vacío. (Jeremías 50, 9)

  • Por eso caerán en sus calles sus jóvenes y todos sus guerreros perecerán aquel día -dice el Señor-. (Jeremías 50, 30)

  • ¡Espada sobre sus adivinos, que se hagan necios; espada sobre sus guerreros, que cojan pánico! (Jeremías 50, 36)


“Deus é servido apenas quando é servido de acordo com a Sua vontade.” São Padre Pio de Pietrelcina