Encontrados 204 resultados para: cosa
el sacerdote calculará el precio de estimación por los años que falten hasta el jubileo, y el hombre pagará aquel mismo día el precio fijado a título de cosa consagrada al Señor. (Levítico 27, 23)
Ninguna cosa de su propiedad -hombres, animales o campos de propiedad hereditaria- que uno consagre al Señor podrá ser vendida o rescatada. Lo que se consagra al Señor es cosa santísima y pertenece al Señor. (Levítico 27, 28)
La décima parte de los productos de la tierra, tanto de los productos del campo como de los frutos de los árboles, pertenece al Señor; es cosa consagrada al Señor. (Levítico 27, 30)
Los israelitas le contestaron: "Subiremos por el camino trillado y, si bebemos de tus aguas, nosotros o nuestros ganados, te daremos el precio de ellas. Es cosa de nada: simplemente pasar a pie". (Números 20, 19)
Balaán les respondió: "Aunque Balac me diera su casa llena de plata y oro, yo no podría traspasar las órdenes del Señor, mi Dios, en cosa alguna, grande o pequeña; (Números 22, 18)
La burra dijo a Balaán: "¿No soy tu burra, que te ha servido siempre de cabalgadura hasta hoy? ¿Te he hecho yo nunca cosa semejante?". Él respondió: "No". (Números 22, 30)
Balaán respondió al ángel del Señor: "¡He pecado! Yo no sabía que eras tú quien me cerraba el paso. Si la cosa te desagrada, ahora mismo me vuelvo". (Números 22, 34)
que, aunque me dieras tu casa llena de oro y plata, yo no podría traspasar las órdenes del Señor ni hacer por propia iniciativa cosa alguna, buena o mala, sino que diría fielmente lo que dijera el Señor? (Números 24, 13)
Si un hombre hace un voto al Señor o se obliga con juramento a alguna cosa, no faltará a su palabra; todo lo que haya salido de su boca, lo cumplirá. (Números 30, 3)
Si lo derribó por odio o arrojó alguna cosa contra él intencionadamente, y se sigue la muerte; (Números 35, 20)
Pero si lo derriba sin querer, sin odio, o arroja contra él alguna cosa sin querer; (Números 35, 22)
Cuando tengáis hijos y nietos y llevéis mucho tiempo en la tierra, si caéis en la prevaricación y os hacéis imágenes talladas de cualquier cosa, haciendo lo que el Señor prohíbe, (Deuteronomio 4, 25)