Encontrados 112 resultados para: Sean

  • Sean para ti solo, y no para extraños a la vez. (Proverbios 5, 17)

  • No seas precipitado en tu boca, y tu corazón no se apresure a proferir una palabra delante de Dios, porque Dios está en los cielos y tú estás en la tierra; por eso sean pocas tus palabras. (Eclesiastés 5, 1)

  • No quieres que las obras de tu sabiduría sean improductivas; por esto los hombres confían sus vidas a un frágil leño y, atravesando las olas en una balsa, llegan sanos y salvos. (Sabiduría 14, 5)

  • Que sean muchos tus amigos, pero uno entre mil tu consejero. (Eclesiástico 6, 6)

  • No andes bromeando con el ineducado, para que no sean insultados tus progenitores. (Eclesiástico 8, 4)

  • Los hombres justos sean tus comensales, y en el temor del Señor esté tu gloria. (Eclesiástico 9, 16)

  • Aunque sean muchos, no te goces en ellos si no tienen el temor del Señor. (Eclesiástico 16, 2)

  • A no ser que sean enviados del altísimo, no hagas caso de ellos. (Eclesiástico 34, 6)

  • Que sus huesos reflorezcan en sus tumbas; que sus nombres, renovados en sus hijos, sean honrados como conviene a aquellos ilustres varones. (Eclesiástico 46, 12)

  • Venid, pues, y discutamos, dice el Señor. Aunque vuestros pecados sean como la grana, blanquearán como la nieve; si fueren rojos cual la púrpura, se volverán como la lana. (Isaías 1, 18)

  • Vienen días -dice el Señor- en que yo visitaré a todos los circuncisos que lo sean en la carne, y no en el corazón: (Jeremías 9, 24)

  • Que sean cubiertos de vergüenza mis perseguidores, y no yo; queden ellos consternados, y no yo. Haz venir sobre ellos el día de la desgracia, destrózalos con doble destrozo. (Jeremías 17, 18)


“Feliz a alma que atinge o nível de perfeição que Deus deseja!” São Padre Pio de Pietrelcina