Encontrados 2874 resultados para: Asa

  • basada en la esperanza de la vida eterna. Dios, que no puede mentir, prometió esa vida desde la eternidad; (Tito 1, 2)

  • que el candidato sea irreprochable; casado una sola vez; que tenga hijos creyentes, a los que no se les pueda inculpar de libertinaje o indisciplina. (Tito 1, 6)

  • Es necesario que el obispo sea irreprochable, como administrador que es de la casa de Dios; no debe ser arrogante, ni colérico, ni borracho, ni amigo de peleas ni de negocios sucios; (Tito 1, 7)

  • Voy a enviarte a Artemas o a Tíquico. En cuanto lleguen, vete a verme a Nicópolis, pues tengo decidido pasar allí el invierno. (Tito 3, 12)

  • a la hermana Apia, a Arquipo, nuestro compañero de fatigas, y a la Iglesia que se reúne en su casa: (Filemon 1, 2)

  • diciendo: Anunciaré tu nombre a mis hermanos, en plena asamblea te alabaré. (Hebreos 2, 12)

  • modelo de fidelidad a Dios, que le dio tal nombramiento como lo fue Moisés en toda la casa de Dios. (Hebreos 3, 2)

  • Él, en efecto, ha sido considerado digno de una gloria superior a la de Moisés, en la misma medida en que la dignidad del arquitecto de una casa supera a la casa misma. (Hebreos 3, 3)

  • Toda casa ha sido construida por alguien, pero es Dios quien ha construido todas las cosas. (Hebreos 3, 4)

  • Moisés, cierto, fue fiel en toda la casa de Dios, en calidad de siervo, como ministro, para dar testimonio de las cosas que debían ser manifestadas; (Hebreos 3, 5)

  • Cristo, por el contrario, lo ha sido en calidad de Hijo, al frente de su casa. Y su casa somos nosotros, con tal que permanezcamos inquebrantables hasta el fin, confesando valientemente nuestra fe y confiados en la esperanza que tenemos. (Hebreos 3, 6)

  • Pues en cierto pasaje dijo acerca del séptimo día: Y Dios descansó de todo su trabajo el séptimo día. (Hebreos 4, 4)


“O amor é a rainha das virtudes. Como as pérolas se ligam por um fio, assim as virtudes, pelo amor. Fogem as pérolas quando se rompe o fio. Assim também as virtudes se desfazem afastando-se o amor”. São Padre Pio de Pietrelcina