Encontrados 205 resultados para: nuevo nacimiento

  • Pero si el sacerdote, al examinar la mancha, ve que esta no se ha extendido por la casa después que fue revocada de nuevo, tendrá que declararla pura, porque la mancha ha desaparecido. (Levítico 14, 48)

  • El hombre encargado de soltar el chivo para Azazel deberá lavar su ropa y bañarse con agua; después podrá entrar de nuevo en el campamento. (Levítico 16, 26)

  • La persona que los queme deberá lavar su ropa y bañarse con agua; después podrá entrar de nuevo en el campamento. (Levítico 16, 28)

  • Por eso tendrán que contar hasta el día siguiente al séptimo sábado: cincuenta días en total. Entonces ofrecerán al Señor una ofrenda de grano nuevo. (Levítico 23, 16)

  • Comerán grano viejo largamente almacenado, y tendrán que tirar el grano viejo para dar lugar al nuevo. (Levítico 26, 10)

  • Así Miriam quedó confinada fuera del campamento durante siete días, y el pueblo no reanudó la marcha hasta que fue admitida de nuevo. (Números 12, 15)

  • Los harás rescatar dentro del mes de su nacimiento, tomando como precio por el rescate cinco siclos -en siclos del Santuario- que equivalen a veinte gueras. (Números 18, 16)

  • En seguida lavará su ropa y se bañará con agua; después podrá entrar de nuevo en el campamento, pero será impuro hasta la tarde. (Números 19, 7)

  • yo enviaré lluvia a la tierra en el momento oportuno -lluvia de otoño y de primavera- y podrás recoger tu trigo, tu vino nuevo y tu aceite. (Deuteronomio 11, 14)

  • Pero al llegar la tarde se lavará, y al ponerse el sol entrará de nuevo en el campamento. (Deuteronomio 23, 12)

  • Entonces tú escucharás de nuevo la voz del Señor y pondrás en práctica todos sus mandamientos, tal como hoy te los prescribo. (Deuteronomio 30, 8)

  • Entonces los dos hombres volvieron a bajar de la montaña, cruzaron el río, y cuando estuvieron de nuevo con Josué, hijo de Nun, lo informaron de todo lo que les había ocurrido. (Josué 2, 23)


“Caminhe sempre e somente no bem e dê, cada dia, um passo à frente na linha vertical, de baixo para cima.” São Padre Pio de Pietrelcina