Encontrados 50 resultados para: peor

  • Por ello, levántate, sal y agradece a tus soldados, que si no sales, te juro por Yavé que esta misma noche no te quedará ningún soldado y ésta será la peor de las desgracias que te haya sucedido desde tu niñez hasta el día de hoy.» (2 Samuel 19, 8)

  • Mi padre los trató duramente, pero yo los trataré peor. Mi padre los azotaba con látigos y yo pondré a las cuerdas ganchitos de hierro.» (1 Reyes 12, 11)

  • mientras que tú te has portado peor que los anteriores reyes. Me has hecho enojar haciéndote otros dioses, dioses que no son más que estatuas; y a mí me has dejado tirado. (1 Reyes 14, 9)

  • Omrí se portó mal con Yavé, siendo peor que cuantos lo precedieron. (1 Reyes 16, 25)

  • Ajab se portó muy mal con Yavé, y fue peor que todos los reyes anteriores. (1 Reyes 16, 30)

  • «Manasés, rey de Judá, ha multiplicado las acciones pésimas y ha actuado peor que los mismos amorreos; ha sido causa de que también la gente de Judá pecara con sus repugnantes imágenes. (2 Reyes 21, 11)

  • Sabe que se acerca el día sin luz, ansiedad y angustia lo vienen a asaltar su mal es peor que si un rey lo atacase. (Job 15, 24)

  • Peor todavía si dices que no encuentras a Dios, y que después de preparar tu defensa lo esperas. (Job 35, 14)

  • Los que esperan mi muerte hacen planes, me amenazan los que me desean lo peor, y rumian sus traiciones todo el día. (Salmos 38, 13)

  • Mis enemigos me desean lo peor: "A ver si se muere y ya no se habla más de él". (Salmos 41, 6)

  • Se sometieron a Baal-Peor, comieron de los sacrificios a los muertos; (Salmos 106, 28)

  • El año ciento sesenta y nueve, siendo rey Demetrio, nosotros los judíos les escribimos en el peor momento de las pruebas que estábamos soportando en esos años. Y les decíamos: «Jasón y sus partidarios han traicionado la causa de la Tierra Santa y del Reino, (2 Macabeos 1, 7)


“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina