Encontrados 246 resultados para: mucho

  • «No estoy loco, excelentísimo Festo, contestó Pablo; estoy diciendo cosas verdaderas con mucho sentido. (Hecho de los Apóstoles 26, 25)

  • Pablo le respondió: «Por poco o por mucho, quiera Dios que no sólo tú, sino también todos los que hoy me escuchan, llegaran hasta donde yo he llegado, a excepción de estas cadenas.» (Hecho de los Apóstoles 26, 29)

  • Mientras pasábamos al abrigo de una pequeña isla llamada Cauda, logramos con mucho esfuerzo recuperar el bote salvavidas. (Hecho de los Apóstoles 27, 16)

  • Si tú fuiste sacado del olivo silvestre que era tu misma especie, para ser injertado en el olivo bueno, que no era de tu especie, sera mucho más fácil para ellos, que son de la misma especie del olivo. (Carta a los Romanos 11, 24)

  • Si nosotros hemos sembrado en ustedes riquezas espirituales, ¿será mucho que cosechemos entre ustedes algunas cosas de este mundo? (1º Carta a los Corintios 9, 11)

  • Me alegraría que todos ustedes hablaran en lenguas, pero más me gustaría que todos fueran profetas. Es mucho mejor tener profetas que quien hable en lenguas, a no ser que haya quien las interprete y así toda la Iglesia saque provecho. (1º Carta a los Corintios 14, 5)

  • En cuanto a nuestro hermano Apolo, le he insistido mucho para que vaya donde ustedes con nuestros hermanos, pero se negó formalmente a hacerlo por ahora. Irá cuando se le presente una oportunidad. (1º Carta a los Corintios 16, 12)

  • La visita de Estefanás, Fortunato y Acaico me ha causado mucha alegría, pues les echaba mucho de menos a todos ustedes. (1º Carta a los Corintios 16, 17)

  • Si tan grande fue el ministerio que sentenciaba la condenación, ¿no lo será mucho más todavía el que procura la santidad? (2º Carta a los Corintios 3, 9)

  • No solamente porque ya lo tenía a mi lado, sino también porque ustedes le habían dado una excelente acogida. Me comentó que ustedes me echaban de menos, que lamentaban lo ocurrido y que estaban muy preocupados por mí, con lo cual me alegré mucho. (2º Carta a los Corintios 7, 7)

  • Por eso me sentí confortado. Además de este consuelo, me alegró mucho ver a Tito tan contento de cómo ustedes lo tranquilizaron. (2º Carta a los Corintios 7, 13)

  • El ahora, al recordar la obediencia de todos y el respeto lleno de humildad con que lo recibieron, siente mucho más cariño por ustedes. (2º Carta a los Corintios 7, 15)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina