3. Él devolvió las mil cien monedas de plata a su madre, y ella dijo: "Quiero consagrar este dinero al Señor y que de mi mano pase a la de mi hijo para hacer con él una imagen tallada y chapeada".





“Mesmo a menor transgressão às leis de Deus será levada em conta.” São Padre Pio de Pietrelcina