4. Los quemaremos a todos, sus montañas chorrearán su sangre y sus llanuras serán cementerios. La planta de sus pies no resistirá ante nosotros, perecerán sin remedio, dice el rey Nabucodonosor, señor de toda la tierra. Él ha hablado, y no caerá en el vacío ninguna de sus palabras.





“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina