4. Entonces David mandó que se la trajeran. Ella vino a su casa, y él se acostó con ella; ella acababa de purificarse de su impureza menstrual. Después se volvió a su casa.





“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina