6. marchó contra los asesinos de sus hermanos. Prendió fuego al puerto por la noche, abrasó las naves y pasó a cuchillo a cuantos se habían refugiado en ellas.





“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina