28. Entonces un hombre de Dios se llegó al rey de Israel, y le dijo: "Esto dice el Señor: Ya que Siria ha dicho que el Señor es el Dios de las montañas y no el Dios de los valles, voy a entregar en tus manos a toda esa inmensa multitud, para que conozcáis que yo soy el Señor".





“Resigna-te a ser neste momento uma pequena abelha. E enquanto esperas ser uma grande abelha, ágil, hábil, capaz de fabricar bom mel, humilha-te com muito amor perante Deus e os homens, pois Deus fala aos que se mantêm diante dele humildemente”. São Padre Pio de Pietrelcina