26. y levantó en ella un altar al Señor sobre el cual ofreció holocaustos y sacrificios de reconciliación. David invocó al Señor, que le respondió haciendo caer del cielo el fuego sobre el altar de los holocaustos,





“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina